sábado, 22 de agosto de 2015

Sexta parada: Hamburgo

¡Holaaamigos!
Día 9 de julio del 2015
Qué penita dejar atrás Berlín... Pero oye, ¡QUE ESTAMOS EN HAMBURGO!

No conocíamos de nada la ciudad ninguna de nostras, pero me habían hablado muy bien de ella.
El hostel desde nos hospedamos estaba en el mismísimo centro, pero MADRE MIA vaya centro...
Como ya os he dicho, no sabíamos nada de la ciudad, pero poco a poco fuimos averiguando de qué iba la cosa: es la ciudad del SEXO.
Creo que en mi vida había visto tantísimos clubs y sexshops por metro cuadrado.

Por el día daba un poco de miedito nuestra zona :/, pero, no se si por desgracia o por suerte, ya estábamos acostumbradas a todo tipo de cosas raras.
Ese día hicimos algo de compra y turismo. Nos dio tiempo a ver la ciudad en solo una tarde. Vamos, lo más destacado.
Lo que más me impresionó fue una escultura de Bismarck enorme, o sea enorme no, gigantesca. No pegaba nada con la ciudad.
Hay que añadir a esto que hacia un tiempo horrible, el viento nos llevaba.
Fuimos también a un parque donde había un jardín japones con un estanque con patos: nos pasamos un buen rato dándoles de comer. ¡Adorables!
Por la noche, Sara y yo teníamos ganas de fiesta (qué raro...) así que fuimos por nuestra zona (St. Puali) a tomar algo. Como ya os comenté en Munich, las zonas cambian de la noche a la mañana (literal). Si por el día daba miedito, por la noche había un ambientazo increíble.
Después de echarnos unos intensos bailes, Sara tomarse su cerveza y yo mi HUGO (bebida alemana estilo mojito), nos fuimos a dormir a nuestro hostel con sabanas amarillas (asqueroso). He de decir que no me considero una persona muy escrupulosa, pero eso no era ni medio normal. No os recomiendo el hostel. Estaba céntrico, sí, pero daba... grimilla diría yo. Lo bueno es que tenía nevera en el cuarto y baño individual. También tenía cocina compartida. A todo esto nada más entrar en recepción un olor... Bueno no sigo que me pongo mala. Os dejo el enlace para que sepáis cual es
Si no encontráis nada más barato o más cerca del centro, os lo recomiendo, pero solo porque estaba en el mismísimo centro (click aquí).

Después de un intenso día en Hamburgo, a la mañana siguiente cogimos el tren para ir a... ¡Bremen!

Impresiones personales: solo os recomiendo el hostel porque está muy céntrico, lo que más me gustó de la ciudad fue el ambientazo nocturno, la ciudad no me gustó.

Besos enormes. x·x·x

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